En noviembre el otoño va avanzando la llegada del invierno y en los bosques de muchos pueblos leoneses, especialmente en el Bierzo, se recogen castañas para asarlas en los tradicionales magostos u hogueras.

En Tercera Actividad no han querido perderse esta singular celebración y esta semana el centro olía y sabía a castañas asadas y chocolate caliente.

“Estas celebraciones son muy importantes para nosotros y para los residentes. Aportan alegría, nos permiten salir de la rutina, nos conectan con el entorno y resultan esenciales para su bienestar”, explica Libertad Páramo, trabajadora social de Tercera Actividad León. Así, aunque no han podido salir a recoger castañas, sí las han preparado, abierto y limpiado para que las cocineras las asasen en el horno. ¡Qué bonito recuerdo el del tacto de la castaña, qué maravilloso olor y qué delicia para el paladar!

Un momento del juego de «Pasapalabra»

Muchas de las personas que han participado en la actividad, han vivido muy de cerca la fiesta del magosto y la celebración de esta semana en el centro les ha servido para rememorar instantes felices. Además de preparar las castañas, la fiesta se ha completado con bailes, chocolate con bizcochos y un improvisado juego de “Pasapalabra”, para incentivar sus capacidades cognitivas. “Hemos hecho hasta los descansos para la publicidad”, comenta Libertad. En este caso, las pausas se han aprovechado para merendar un buen cucurucho de castañas asadas envueltas en papel de periódico al más puro estilo tradicional y presentadas en un carro realizado con materiales reciclados.

Para guardar un bonito recuerdo de este día, trabajadores y residentes han elaborado unos broches con forma de simpática castaña a base de fieltro y cartulinas que lucirán en las solapas tanto ellos como familiares y amigos y, que, sin duda, dibujarán una gran sonrisa en sus rostros.

Elaboración de broches con forma de castaña