No hay edades, sino experiencias: Teresa, toda una vida en Perazancas de Ojeda
Rezuma ternura por cada poro de su piel. Sus ojos claros y su expresión serena transmiten paz la de quien ha aprendido a afrontar cada día con una sonrisa, aportando siempre lo mejor de sí. Llegó a nuestro centro de Aguilar de Campoo hace apenas unos meses y afirma sentirse
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