No hay edades, sino experiencias: Mai, inquieta, afable y activa
El vivo retrato de la felicidad, ¿no os parece? Es, al menos, lo que transmite esta fotografía y ella misma. Cierto que su mente ya no es lo que era, que apenas recuerda su día a día y que todo lo que vais a leer lo sabemos por su sobrino
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